La Red de Varamientos hace un llamado a cuidar el hábitat del manatí, ya que fenómenos de variabilidad climática, como El Niño, han llevado a que los niveles de las ciénagas disminuyan, aumentando el riesgo de los manatíes a enfrentar varamientos inesperados.

Cuando comienzan a escasear las lluvias y la profundidad del agua disminuye, los manatíes migran hacia áreas con mayor profundidad, como caños, pozas o áreas inundables para permanecer durante el verano; allí, reducen su metabolismo para no gastar tanta energía, permaneciendo en un estado de reposo prolongado. En estas épocas, los manatíes se muestran muy vulnerables.

En este sentido, algunas recomendaciones son:

• Transitar los cuerpos de agua con precaución y baja velocidad para no molestar o asustar a los manatíes.

• Si observas manatíes, guardar una distancia de mínimo 10 metros.

• No intentar tocar a los manatíes, ni ofrecerles alimento.

• Tampoco cierre los canales de conectividad entre las ciénagas, pozas y los caños o ríos.

• Reportar las alertas sobre manatíes a la Red de Varamientos de Manatíes del Magdalena

Medio 322 9838738.

Por, Andrea Muñoz Calderón

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