El proyecto que busca beneficiar al sector apicultor, es liderado por la Corporación Autónoma Regional de Santander, y consiste en hacer entrega de las maderas que han sido decomisadas por las autoridades en operativos de control a 11 municipios, para que éstos con aliados estratégicos y los apicultores realicen la transformación de las mismas y las aprovechen en la construcción de apiarios en zonas rurales.
Cabe resaltar que los apicultores beneficiados, se encuentran asociados e integran la FUNDACIÓN HONEY BEE IMPACT, institución que viene desarrollando programas de emprendimiento sostenible en comunidades rurales y escolares del Departamento de Santander.
Por su parte el Director General de la CAS, Ing. Alexcevith Acosta, dijo, “La apicultura tiene un impacto muy positivo en la sostenibilidad de los ecosistemas, por ende la actividad polinizadora de las abejas realiza un trabajo muy importante en la productividad de muchos cultivos agrícolas y de paso en la soberanía alimentaria, por eso vemos con buenos ojos este proyecto que apoya los procesos de cuidado y preservación de los polinizadores para la conservación de los bosques”.
Los municipios beneficiados son: Simacota, Aratoca, Socorro, Confines, Hato, Mogotes, Oiba, Palmas del Socorro, Paramo, Suaita y Valle de San José.
Las maderas que se utilizan para el proyecto son aquellas que ya han resuelto los procesos sancionatorios ambientales, y corresponden a especies como Jacaranda, Chingalé Mulato, Lache perra, cedro, Eucalipto, Mapo, Caracolí, Momo Higuerón, amarillo entre otros.
El proyecto cuenta con promotores privados como el Banco BBVA, Universidad UIS sede Socorro, Universidad George Mason (Virginia Estados Unidos), Universidad de Champlain (Vermont).