• En el marco del Día Internacional para la Protección de los Osos, la Corporación Autónoma Regional de Santander (CAS) destaca las acciones que viene implementando junto con la Fundación GAIA para la conservación del Oso Andino (Tremarctos ornatus) en el Distrito Regional de Manejo Integrado – DRMI Guantiva La Rusia.
  • El proyecto “CuidadOSOS” por el Camino de la Conservación” busca proteger hábitats clave del Oso Andino y otras especies silvestres, al mismo tiempo que promueve la participación activa de las comunidades locales en prácticas sostenibles.
  • La iniciativa también tiene un enfoque socioeconómico, con el objetivo de mejorar la calidad de vida de las poblaciones rurales a través de la restauración ecológica y el fortalecimiento de capacidades locales.

Este 21 de febrero, en el marco del Día Internacional para la Protección de los Osos, la Corporación Autónoma Regional de Santander (CAS) se une a la Fundación GAIA para resaltar el trabajo conjunto que están realizando en la conservación del Oso Andino (Tremarctos ornatus), una especie única y emblemática de la fauna colombiana.

El Oso Andino, conocido también como Oso de Anteojos, es el único representante de los osos en América del Sur y es considerado vulnerable a la extinción. Habita principalmente la Cordillera de los Andes, pero su existencia está siendo amenazada por factores como la cacería ilegal, la destrucción de su hábitat por la expansión de actividades agropecuarias y el uso de sus órganos en prácticas tradicionales.

Ante esta alarmante situación, la CAS, en colaboración con la Fundación GAIA, está llevando a cabo un proyecto de conservación integral que no solo busca proteger al Oso Andino, sino también mejorar las condiciones socioeconómicas de las comunidades rurales cercanas.

Un Proyecto Integral para la Conservación

El proyecto, titulado “CuidadOSOS por el Camino de la Conservación”, tiene como objetivo implementar acciones estratégicas para la protección de los ecosistemas y la fauna silvestre en el Distrito Regional de Manejo Integrado – DRMI Guantiva La Rusia. Este ecosistema de 119.009 hectáreas es hogar no solo del Oso Andino, sino también de especies como el Puma y una rica biodiversidad que se ve afectada por las actividades humanas.

En este sentido, el proyecto busca regular, minimizar e impedir los impactos negativos que generan las actividades antrópicas, implementando soluciones basadas en la naturaleza para restaurar y preservar los hábitats naturales. A través de programas de educación ambiental y fortalecimiento de capacidades, las comunidades locales se empoderan y se convierten en actores clave en la conservación, promoviendo prácticas de convivencia armónica y sostenible con la naturaleza.

Conservación y Bienestar Comunitario El enfoque del proyecto va más allá de la protección de especies.

La CAS y la Fundación GAIA buscan que la conservación del Oso Andino y otras especies no solo beneficie a la fauna y flora, sino también a las comunidades humanas, mejorando su bienestar y promoviendo el desarrollo sostenible. A través de acuerdos voluntarios de conservación, los propietarios de tierras y las comunidades locales se comprometen a proteger los recursos naturales, lo que fortalece el tejido social y mejora las condiciones de vida.

El Oso Andino: Un Símbolo de la Biodiversidad de Santander

El Oso Andino es una especie clave para los ecosistemas de la región, ya que su presencia indica un equilibrio saludable en el medio ambiente. Además de ser vital para la conservación de la biodiversidad, su protección impulsa el desarrollo de un modelo de conservación que integra la sostenibilidad ecológica con el bienestar humano.

Un Compromiso por la Conservación En la CAS estamos comprometidos con la protección de la biodiversidad de Santander, y este proyecto es solo una muestra de los esfuerzos que estamos llevando a cabo para asegurar que el Oso Andino y otras especies continúen siendo parte de nuestro patrimonio natural.

Desde el DRMI Guantiva La Rusia, seguimos trabajando para garantizar la coexistencia pacífica entre la fauna silvestre y las comunidades rurales, promoviendo la conservación de los hábitats que son esenciales para el equilibrio ecológico de la región.