Hoy Santander está de luto por el hallazgo de dos cóndores sin vida en zona rural del municipio de Cerrito, y aunque su deceso aún es materia de investigación, las probabilidades de que hayan muerto a causa de envenamiento son altas, ya que por años esta especie ha estado amenazada por un conflicto humano fauna que ha sido difícil de resolver, y que está llevando a su extinción pese a los esfuerzos que se han hecho de repoblamiento.

La Comisión de la Corporación Autónoma Regional de Santander, integrada por biólogos y veterinarios se unen a la expedición de búsqueda conformada por habitantes de la región, autoridades locales, cuerpo de bomberos, Neotropical, Sonora, entre otros, para realizar un recorrido por la zona del Páramo de Almorzadero donde fueron hallados los cuerpos sin vida de los cóndores, con el fin de identificar la situación que pudo causarles la muerte, o si llegado el caso existen más especímenes que puedan requerir atención.

Los cuerpos sin vida de los cóndores fueron trasladados a la ciudad de Medellín a la clínica “Medicina Veterinaria Forense de Colombia Animal Defense”, donde se le practicarán los exámenes pertinentes que determinarán la causa de muerte.

Por su parte el director general de la CAS, Ing. Alexcevith Acosta, recalcó que “Según la Resolución 1912 de 2017, del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, el Cóndor Andino se encuentra dentro de las especies amenazadas en la categoría Vulnerable, (VU), aquellas que están enfrentando un riesgo de extinción alto en estado de vida silvestre, por lo que merece toda nuestra atención para conservar y preservar la especie”.

Dato: El más reciente Censo de Cóndores realizado a principios de este año 2021 por la Fundación Neotropical, arrojó un resultado preocupante al notar la presencia de tan solo 63 individuos en el país, 34 de ellos en zona de los Andes nororientales, y el mayor registro de individuos juveniles en los páramos santandereanos.

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