Oso de Anteojos haciendo sus ejercicios de rutina para mantenerse en forma, luego de una suculenta comida de palmas, bayas y guiches. Una gran alegría para don Samuel Villabona, quien tuvo la suerte de registrarlo con su cámara en la vereda Las Salinas del municipio Santa Bárbara.
Su presencia en este corredor del bosque alto andino, es un buen presagio para la conservación de la biodiversidad y de sus tesoros como el agua.
Por, Andrea Muñoz Calderón