La comunidad de El Llanito en Barrancabermeja se comunicó con la Red de Varamientos de Manatíes del Magdalena Medio (RVM), donde la Corporación Autónoma Regional de Santander – CAS, hace parte, para alertar sobre los bajos niveles de agua en la Ciénaga El Llanito y prevenir el varamiento de dos manatíes antillanos.
• Un equipo interdisciplinario de la RVM hizo presencia en el sitio, donde no fue posible observar a los manatíes y se pudo confirmar que, a pesar de la entrada de la época seca, los niveles del agua de la Ciénaga El Llanito se encontraban estables.
• No obstante, la RVM hace un llamado a la comunidad y a las empresas presentes cerca a dichos cuerpos de agua, para que cuiden la ciénaga y el recurso hídrico, en especial en esta época del año, debido al tiempo seco, la escasez de lluvias y altas temperaturas.
• Fenómenos de variabilidad climática, como El Niño, han llevado a que los niveles de las ciénagas disminuyan, aumentando el riesgo de los manatíes a enfrentar atascos inesperados.
• Los manatíes antillanos, Trinchechus manatus manatus, están catalogados como En Peligro, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
La comunidad de El Llanito en Barrancabermeja reportó a la línea de atención de la Red de Varamientos de Manatíes del Magdalena Medio (RVM), unos individuos en posibles condiciones de vulnerabilidad, debido a los bajos niveles de agua.
Es así como un equipo interdisciplinario de la RVM, hizo presencia en el sitio, constatando que, afortunadamente no se trataba de varamientos ni empozamientos de los manatíes reportados.
Tras tomar muestras de agua y realizar análisis de las características fisicoquímicas en campo, se determina que la calidad del agua es de buena calidad, de acuerdo con los parámetros del Ministerio del Medio Ambiente (artículo 2, numeral 1 de la resolución 631 de 2015).
No obstante, se evidencia una coloración verdosa; se presume que esto se debe a un posible aumento de nutrientes en el cuerpo de agua que aceleran los procesos de eutrofización, donde se genera una floración de algas.
La Red de Varamientos hace un llamado a cuidar el hábitat del manatí, ya que fenómenos de variabilidad climática, como El Niño, han llevado a que los niveles de las ciénagas disminuyan, aumentando el riesgo de los manatíes a enfrentar atascos inesperados.
Cuando comienzan a escasear las lluvias y la profundidad del agua disminuye, los manatíes se desplazan a áreas con mayor profundidad, como caños, pozas o áreas inundables, para permanecer durante el verano. Allí, reducen su metabolismo para no gastar tanta energía, permaneciendo en un estado de reposo prolongado.
En estas épocas, los manatíes se muestran muy vulnerables cuando la capacidad de albergar suficientes volúmenes de agua y profundidades en las ciénagas llegan a generar la muerte de individuos de las especies, incluso de grupos y juveniles. En este sentido, algunas recomendaciones son:
• Transitar los cuerpos de agua con precaución y baja velocidad para no molestar o asustar a los manatíes.
• Si observa manatíes, guarde una distancia de mínimo 10 mts.
• No intente tocarlos, ni ofrecerle alimento.
• Tampoco cierre los canales de conectividad entre las ciénagas, pozas y los caños o ríos.
• Reportar las alertas sobre manatíes a la Red de Varamientos de Manatíes del Magdalena Medio 322 9838738.
Por, Andrea Muñoz Calderón